López de Santa Anna, López Portillo, López-Gatell, López Obrador... Estos cuatro personajes ya serían suficientes para ennumerar las grandes tragedias que ha vivido México a través de los periodos de la historia donde dichos personajes han sido trascendentes y que los mexicanos hubieramos aprendido la lección, pero no. Como si no tuvíeramos suficiente con esos otros López, ahora llega a la Secretaría de Gobernación uno más, un tal Adán Augusto López Hernández. 

Al parecer el nuevo Secretario de Gobernación no tiene más mérito que ser paisano y "cuate" casi pariente del demente que habita en Palacio Nacional. Dicen los que conocen de estos temas, que son cercanísimos, que un López es hombre de toda confianza del otro, a tal grado de que le prestó sus servicios de notaría pública para "regularizar" algunos inmuebles para que no figuraran como propios si no como "donaciones", ya saben cómo se las gastan estos López. Por ahí dicen también que tiene unas cuántas denuncias en su contra archivadas por la Fiscalía General de la República.

Augusto López llega en sustitución de uno de los gran floreros de la malnacida 4ta Transformación, la ex Secretaria de Gobernación Olga Sánchez Florero.... perdón Cordero. El penoso papel que hizo esta señora como dizque Secretaria de Gobernación será facil de superar por cualquiera. La barra está tan baja que con que el nuevo titular de la Secretaría sepa respirar y tenga pulso ya estará a medio camino de superar el papel de florero que desempeñó quien ejerció el puesto antes que él.

Desgraciadamente, el cambio en Gobernación no tiene nada que ver con mejorar las cosas en el país o de darle prioridad a las necesidades de los mexicanos, ni mucho menos significa un cambio de dirección o corrección del rumbo ante la desastroza gestión de la presente administración. Por el contrario, ha llegado un operador político incondicional cuyo papel, seguramente se centrará en garantizar la continuidad de esta pesadilla conocida como 4ta. Transformación.

Tiempo atrás se pronosticó la radicalización (aún más) del enfermo mental que ocupa la silla presidencial. Conforme se han ido acabando los recursos y se acrecentan las carencias, y conforme se avanza en la segunda mitad del sexenio, es necesario tomar los pasos desicivos hacia la captura total del poder a como dé lugar. ¡Es hora o núnca! Hay que repetir hasta el cansancio..., todo lo que hace López Obrador es con fines políticos con la única intención de mantener el poder. Por eso Olga Sánchez se va al Senado y por eso llega su paisano López a Gobernación.

Bajo esta óptica y pronóstico de radicalización, se anticipa que el trabajo de Adán López será exclusivamente para cumplir los intereses, ocurrencias y caprichos del que se siente emperador de México. Por lo tanto, podríamos vaticinar que no será algo benéfico para el país. ¿Será tan trágico su papel como el de los otros López de la historia? Esperemos que no.

A México ya no le queda mucho por perder. Con López de Santa Anna, México perdió gran parte de su territorio, con López Portillo, México perdió gran parte del valor de su moneda y se sumergió en una de las peores crisis económicas de su historia, con López-Gatell, México ha perdido parte de su población por su pésimo manejo de la pandemia, y con López Obrador, México ha perdido inversiones, infraestructura, empleos, salud, bueno hasta la vergüenza y la dignidad, y como ejemplo están todos los que le siguen aplaudiendo y los que permanecen en su círculo. Pero sobre todo se ha perdido la esperanza de ser un país triunfador. Esperemos que con este otro López México no pierda hasta la camisa ó la poca libertad que todavía nos queda como país.